domingo, 11 de septiembre de 2016

KUBO Y LAS DOS CUERDAS MÁGICAS (Review): Esto no es Disney, bitches.

Hace algunas semanas os hablaba maravillas de Buscando a Dory, pero tengo que decir que la película de animación que más me ha impactado este verano es sin duda Kubo y las dos cuerdas mágicas. En seguida os cuento por qué (-libre de spoilers-)
Japón, época de samuráis. Una mujer con un bebé navega a través de la tormenta hasta llegar a una pequeña isla. Ese bebé es Kubo. De niño tendrá que ganarse la vida contando historias a través de su poder para animar figuras de origami, pero cada noche volverá a lo alto de la montaña para cuidar de su madre enferma. Un día descubre que el poderoso Rey Luna sigue buscándole cada noche para arrebatarle el ojo que le queda, por lo que tendrá que emprender una aventura para conseguir lo necesario para derrotarlo. Armado únicamente con su magia, su shamisen (su instrumento mágico) y sus papeles de origami, se verá forzado a iniciar su viaje. 


Esto más que una review es una entrada cuya misión es animaros a que la veáis NO ME ESCONDO. Creo que son muchos los motivos por los que os puede gustar esta película. 

Quizás podríamos hablar del increíble trabajo de animación en stop-motion que le dan un toque único y artesanal, pero que a veces está tan bien hecho que cuesta darse cuenta de que estamos viendo fotogramas de marionetas continuamente. Eso por no hablar de la animación de las batallas, que me dejaron con la boca abierta.

La historia es sin duda el pilar principal de toda buena película, y no podría ser menos: en Kubo se tratan los temas de la familia, la amistad, el amor, la muerte, el miedo y otros incluso más profundos, que nos harán reír, llorar, enfadarnos y reflexionar. 
Esto no es Disney, lo cual es una ventaja. Muchas veces cuando empezamos a ver una peli de Disney y vemos que se tuercen las cosas, hay una vocecilla en nuestro interior que nos dice que no nos preocupemos, que esto es Disney y que todo terminará bien. Sin embargo, Kubo nos deja claro desde los primeros minutos que no tenemos ni idea de cómo van a suceder las cosas, lo que le da más puntos de originalidad y permite que la historia se pueda volver más oscura en cualquier momento.

Considero que los personajes son difíciles de olvidar. En bastantes ocasiones sueltan frases que no esperaba en absoluto, así que, pese a que algunos tengan más desarrollo que otros, no los considero personajes planos. Aunque les cogí cariño a absolutamente todos los personajes principales, debo destacar a Mona, su alternancia de badass a sobreprotectora me conquistó de inmediato.


En resumen, si os interesa la animación, la cultura japonesa y/o las historias de aventuras y fantasía, ya estáis corriendo a vuestro cine de confianza.

¡Un abrazote!


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